• Un juez federal determinó que existe riesgo de fuga si se modifica su medida cautelar.
• La prisión preventiva se mantiene por considerarse legal y necesaria para el proceso.
• El empresario enfrenta cargos por delincuencia organizada, narcotráfico y lavado de dinero.
Decisión judicial
El empresario de origen chino-mexicano Zhenli Ye Gon continuará recluido en el penal del Altiplano, luego de que el Juzgado Cuarto de Distrito en Materia Penal del Estado de México negó el amparo que buscaba modificar su prisión preventiva. La resolución, emitida el 18 de noviembre por el juez Daniel Marcelino Niño Jiménez, concluyó que la medida cautelar cumple con los requisitos constitucionales y procesales, por lo que no procede su sustitución.
Argumentos del juez
El fallo señala que existe un riesgo elevado de fuga si Ye Gon enfrentara su proceso en libertad, debido a que contaba con múltiples domicilios y no se acreditó arraigo en su última residencia. La Fiscalía General de la República destacó además que los delitos imputados, por su gravedad, incrementan la posibilidad de sustracción de la justicia.
El caso, que sigue sin sentencia, ya había sido motivo de otro amparo previamente negado por un juez federal.
Procesos penales en curso
Ye Gon enfrenta diversas acusaciones, entre ellas:
- Delincuencia organizada
- Delitos contra la salud en varias modalidades
- Operaciones con recursos de procedencia ilícita
- Posesión de armas de uso exclusivo del Ejército
- Posesión de cartuchos también de uso militar
Según el juez, la prisión preventiva justificada garantiza que el empresario permanezca a disposición de la autoridad judicial durante todo el procedimiento.
Antecedentes del caso
El empresario fue detenido en Estados Unidos y extraditado a México en 2016. Su caso tomó relevancia desde 2007, cuando autoridades federales localizaron en su residencia de Lomas de Chapultepec más de 205 millones de dólares en efectivo, además de joyas, armas y divisas.
Ye Gon también ha sido acusado de comercializar ilegalmente pseudoefedrina y efedrina para la fabricación de metanfetamina mediante empresas fachada. Tras la incautación de toneladas de estos precursores en Lázaro Cárdenas, huyó a Estados Unidos, donde fue arrestado por la DEA antes de su extradición.














