• La falta de controladores aéreos afecta operaciones en Chicago, Nashville y Houston.
• El cierre del Gobierno deja sin personal a torres de control en todo el país.
• Controladores temen no recibir salario y aumenta la presión en el sistema aéreo.
Crisis aérea por falta de personal
El séptimo día del cierre del Gobierno de Estados Unidos ha provocado una crisis en los principales aeropuertos del país. La Administración Federal de Aviación (FAA) confirmó una escasez crítica de controladores aéreos que ha afectado vuelos en Chicago, Nashville, Houston, Newark, Las Vegas, Atlanta y otras ciudades. Las demoras se originan por la falta de empleados disponibles en las torres de control, situación que ha llevado al cierre temporal de instalaciones de aproximación y salida en varias terminales.
Aeropuertos de Chicago y Nashville entre los más afectados
El Aeropuerto Internacional O’Hare de Chicago operó con menos personal durante nueve horas la noche del martes, registrando demoras promedio de 41 minutos. En Nashville, la torre de control cerró durante cinco horas, y los vuelos tuvieron que ser gestionados desde un centro de control en Memphis, con retrasos de hasta dos horas. Houston enfrenta un escenario similar: los aeropuertos Hobby y George Bush Intercontinental experimentan retrasos en tierra y posibles suspensiones nocturnas de vuelos debido a la escasez de personal operativo.
FAA alerta sobre aumento de ausencias
El secretario de Transporte, Sean Duffy, informó que más controladores se están reportando enfermos, aunque el sindicato que los representa, la Asociación Nacional de Controladores de Tráfico Aéreo (NATCA), ha pedido no abusar de las bajas médicas ni realizar ausencias coordinadas. Los trabajadores son considerados esenciales, por lo que deben presentarse a trabajar a pesar de no recibir salario mientras dure el cierre. Si la paralización del Gobierno continúa, los controladores dejarán de percibir ingresos a partir del 28 de octubre.
Preocupación económica y riesgo operativo
Duffy advirtió que muchos controladores temen no poder cubrir gastos básicos si el conflicto político persiste. “Este es su sustento. Se preguntan cómo pagarán su hipoteca o pondrán comida en la mesa”, declaró. NATCA subrayó que la escasez de personal vuelve frágil al sistema aéreo, pues basta con unas cuantas ausencias para generar demoras masivas. Además, la fatiga y el estrés incrementan los riesgos de seguridad en los aeropuertos más concurridos del país.
Pilotos operan sin torre de control en algunos aeropuertos
En aeropuertos como Burbank, California, los pilotos han tenido que coordinar aterrizajes y despegues sin apoyo de controladores, usando una frecuencia común conocida como CTAF. Aunque este método es funcional, expertos advierten que no ofrece el mismo nivel de seguridad que una torre activa. Durante el cierre temporal de la torre de Burbank, despegaron 37 vuelos y aterrizaron 33, acumulando más de dos horas de retrasos. En total, 11 instalaciones de la FAA reportaron escasez de personal esa noche, incluyendo las torres de Phoenix, Denver, Newark, Washington e Indianápolis.
Contexto político del cierre
La parálisis del Gobierno federal ocurre en medio de un enfrentamiento entre demócratas y republicanos sobre el financiamiento de programas como Obamacare y el Seguro Social. Sin un acuerdo presupuestal, múltiples agencias federales, incluida la FAA, operan sin recursos suficientes, afectando de forma directa la seguridad y eficiencia del transporte aéreo.