Se tardaron, pero al fin anunciaron lo que era un hecho: “Por segunda vez en su historia, el Maratónde Chicago ha sido cancelado”. Los organizadores del Bank of America Chicago Marathonanunciaron ayer que la edición 43 de la carrera, programada para el 11 de octubre, no se realizará, debido a la pandemia de coronavirus.
Lo cierto es que después de la cancelación de Nueva York, era previsible que Chicago tomara la misma decisión, y ahora la pregunta es: ¿qué hará Londres? Lo que es seguro es que para lo que resta del año, y mientras no haya una vacuna que elimine el riesgo de enfermar y permita regresar a las carreras masivas, seguiremos corriendo bajo un mundo virtual.
Y es que correr a distancia o virtualmente tiene sus grandes ventajas; por ejemplo, se puede elegir cualquier hora y cualquier lugar para la carrera, al final sólo se tiene que subir los resultados en línea, dentro del tiempo límite que dan los organizadores, y a los pocos días se recibe la medalla de finalista, la mayoría son muy bonitas.
También existen aplicaciones como Zwift Run, que simula un mundo virtual que se baja a nuestro celular, tablet, computadora o Apple TV. Ahí nosotros tendremos a nuestro “personaje”, como si se tratara de un videojuego. Cuando corremos, ya sea en la caminadora o sin ella, nuestro avatar también corre, exactamente al mismo ritmo al que vamos nosotros.
Para “jugar” se necesita de un reloj compatible con la aplicación, un sensor que va en uno de los tenis, o unos audífonos con podómetro, que son los que se encargan de emparejarse con la aplicación de Zwift en el teléfono (o donde la uses) y enviará nuestros datos de ritmo, cadencia y demás. Hay ocho mundos en Zwift: Watopia, Londres, Richmond, Innsbruck, Yorkshire, Nueva York, París y Berlín que cambian según un cronograma que se puede encontrar en el sitio de esta comunidad.
Se “vive” lo que verías en una carrera normal; desde el arco de salida, los demás corredores, áreas para calentar, la cuenta regresiva, la distancia que hayas elegido, espectadores que animan y echan porras. Lo cierto es que resulta muy divertido. Lo interesante será cuando los grandes maratones puedan realizar renders con las rutas de las carreras de cómo las correríamos si estuviésemos en vivo.