Los propósitos que cada uno se formula son tan necesarios como respetables, aún cuando siempre exista quien cuestione a ese amigo o familiar que cada año se propone bajar de peso, llevar una vida más saludable o ahorrar. El ejercicio de fijarnos metas y hacer propósitos en un nuevo ciclo de vida es algo inherente a los seres humanos, y es una forma de mantener viva la esperanza y la fe de que el mundo y nuestra vida personal siempre pueden y deben mejorar.
Es verdad que el 2020 fue un año duro, en el que no pudimos, entre otras cosas, practicar este deporte que nos apasiona y nos hace tanto bien, al menos como lo hacíamos antes de la pandemia; ahora en el 2021 el coronavirus sigue afuera y no podemos bajar la guardia, ni olvidar lo que aprendimos este año que terminó: fuerza, resiliencia, capacidad para adaptarnos, seguridad, y el uso de tecnología para hacer carreras virtuales.
Sin embargo, hasta no estar vacunados nuestra vida continuará condicionada entre lo que se puede y no se debe hacer, y es a partir de estos principios desde donde debemos plantear nuestros objetivos deportivos; entonces la pregunta es: ¿podemos salir a correr de forma segura? La respuesta es sí, pero a solas, o con personas que conviven contigo.
Primero elabora un plan de seguridad; por ejemplo, puedes a salir a primera hora de la mañana, mantener dos o tres metros de distancia entre otro corredor y si vas corriendo detrás de alguien, lo mejor es adelantarse a la distancia mencionada, y después volver a tu carril. Se recomienda llevar cubrebocas puesto mientras se cruza con otras personas y quitarlo cuando se vaya solo.
El reto ahora es mantenernos saludables los próximos 12 meses del año, y si eres de los que la pandemia paralizó completamente tu vida deportiva y tu propósito es retomar y comenzar de cero, te comparto este plan para regresar a la actividad de manera segura:
Comenzaremos con sesiones de 30 minutos de caminata suave. Ya habrá tiempo de ir aumentando. Después, durante ocho semanas iremos poco a poco acostumbrando al cuerpo a trotar de nuevo.
Durante todo el programa entrenaremos tres días a la semana no consecutivos; por ejemplo: lunes, miércoles y viernes, para dar tiempo al cuerpo de recuperarse. En las dos primeras semanas vas a trotar MUY SUAVE 30 segundos y caminarás otros 30. La idea es hacer 20 bloques para completar 20 minutos de actividad.
La tercera semana tocan 40 segundos de trote y 40 de caminata, para hacer un total de 24 minutos. La cuarta semana son 40 segundos de trote y 20 caminando, con un total de 30 minutos de ejercicio. En la quinta semana trotarás cuatro minutos y caminarás uno, por lo que te darán 30 minutos de actividad.
Para la sexta semana son cuatro minutos de trote, por uno de caminata, y debes completar 35 minutos. La semana siete harás 10 minutos de trote y uno caminando, y en este caso cada bloque se realiza cuatro veces. Y ya en la octava semana serás capaz de trotar 10 minutos por uno de caminata, y podrás repetir cinco veces cada bloque.
Ahora sólo haz acopio de fuerza voluntad. Las promesas que nos hacemos a inicio de año requieren grandes esfuerzos y si las cumplimos, las recompensas son grandes: nos convierten en personas más confiables ante nosotros mismos, y nos ayudan a mantener la esperanza y la fe en que todo estará mejor.